martes, 30 de septiembre de 2014

Ultimo día en India

Qué ingenuas fuímos cuando creímos que el viaje de vuelta sería coser y cantar, lndia nos había preparado su traca final. A lo largo de las tres semanas de viaje intenté ser muy precavida para no caer enferma, me lavaba las manos con gel desinfectante a todas horas, el agua siempre embotellada, nada de hielo en las bebidas e intentaba evitar verduras crudas y comida callejera.





Para reducir el número de picaduras no usaba perfume ni crema corporal con esencia, y cuando empezaba a oscurecer siempre intentaba ir tapada hasta el cuello y embadurnada en spray antimosquitos (especial para embarazadas), pero cuando creía haber llegado al final del viaje sin ningún percance, me puse mala el día que nos volvíamos a casa y lo pasé tirada en la cama del bungalow de Goa, vomitando cada 2 horas. 


Esa misma noche cargamos nuestras mochilas a la espalda y comenzamos la odisea. Después de haber cogido un vuelo de conexión en Goa y de discutir con la mitad del personal de tierra, llegamos POR FIN al aeropuerto de Bombay para enlazar con el vuelo a Londres


Era de madrugada y el cansancio podía con nosotras. Estábamos haciendo el check in cuando la azafata de turno se dió cuenta de que no me encontraba bien y Silvia mencionó que estaba embarazada, apaga y vámonos.


Fué en ese momento cuando entró en escena el coordinador del vuelo, empeñado en que tenía que ir al médico y  no quería dejarme volar!! Yo sólo era capaz de decir "EXCUSE ME??? Por la gloria de Shiva, de Ganesha y de todos sus dioses, déjeme salir de aquí que no aguanto más!!!"

Escape FROM Mumbai
              
La bendita jefa de cabina apareció por allí y me dió la autorización para volar, aún así el coordinador no estaba de acuerdo y se inició una batalla contra ellos para llegar hasta el avión...la del check in y el coordinador nos perseguían por el aeropuerto, les encontramos haciendo barricada en el control de pasaporte pero nosotras les hicimos un buen placaje para llegar a la puerta de embarque antes que ellos...surrealismo puro, éramos una escena digna de una película de Almodóvar
Por fin alcanzamos la zona de embarque, miramos a través de la cristalera y ahí se alzaba el avión de Virgin Atlantic como si de un espejismo se tratase.


Mientras nos acerábamos al avión creíamos estar ante las puertas del cielo (nunca mejor dicho). Parecía que estábamos entrando en otra dimensión, había dejado de oler a curry, los asientos parecían relucientes y ser tan cómodos como un colchón "Lo Mónaco". Los zumos sabían como recién exprimidos y la comida traída de un catering de lujo!!!! 



Al despegar sentí un gran alivio, juré y perjuré que nunca volvería a pisar ese país. Cuando aterrizamos en el aeropuerto de Heathrow no me lo podía creer, nunca antes me había sentido tan bien al llegar a Londres, todo olía a limpio, los baños del aeropuerto me parecían maravillosos y no paraba de pensar "Europa cuánto te quiero!!!"

"THERE IS NOTHING LIKE RETURNING TO A PLACE THAT REMAINS UNCHANGED TO FIND THE WAYS IN WHICH YOU YOURSELF HAVE ALTERED" 



lunes, 29 de septiembre de 2014

India y embarazada


Si la India es ya un viaje difícil de hacer, imaginaos cómo es estando embarazada. Mochila a la espalda, vuelos, conexiones, transbordos, esperas, barcos, trenes...y más trenes. Rodeada de millones de especias y de olores que en mi estado, parecían infernales. Nuestros planes se vieron truncados, después de días eternos viajando para atravesar la India de punta a punta...no pudimos hacer el curso de buceo, ni nadar con el elefante Rajan en las playas del mar de Andaman, ni terminar nuestro curso de yoga en el ashram de Trivandrum, tampoco disfrutar tranquilas de un día de compras en el mercadillo hippie de Anjuna, ni emborracharnos en una de las fiestas trance de Goa.






Parecía que la vida nos estaba dando una lección por estar en la India en vez de buscando apoyo en casa. Fueron varias las ocasiones en las que estuvimos a punto de coger el primer vuelo a Europa...pero como la cabezonería nos caracteriza, seguimos la ruta tal y como lo habíamos planeado, aunque no disfrutamos de cada lugar como lo habíamos imaginado, estaba claro que en este viaje NADA podía salir según el plan. Me encontraba cansada y con mucho sueño, con poca paciencia para aguantar a los personajillos que iban apareciendo en nuestro camino, era como una zombie nauseabunda, tenía poco apetito y la mayor parte de la comida me generaba rechazo. Silvia fue mi gran apoyo cada día de ese eterno viaje, formábamos un buen equipo, cuando flaqueaba una, la otra mantenía la calma, se creo un vínculo de amistad muy fuerte entre nosotras.




Habían pasado ya tres semanas, la India no solo no me había ayudado a encontrar la repuesta si no que me había hundido más en la duda. Necesitaba llegar a Madrid, tomarme un colacao con leche muy fría para desayunar y un plato de pasta gallo con tomate Orlando para comer!! Necesitaba volver a casa, ver a mi madre y dormir en mi cama, bajo el edredón de plumas. La India me estaba enseñando que la repuesta no la podía encontrar huyendo del problema, evadirme solo me había generado más angustia, tenía que afrontar lo que me estaba pasando y ser fuerte para tomar una decisión, la decisión más importante de mi vida.

"EVERYTHING YOU NEED TO KNOW, YOU HAVE LEARND THROUGH YOUR JOURNEY"